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NO SOY SUJETO DE UNA REENCARNACIÓN POST MORTEM
INDICE: 
  1. ¿De dónde surge la idea de una reencarnación?
  2. ¿Qué hay desde las antiguas civilizaciones? 
  3. Definiendo los conceptos influyentes de la reencarnación 
  4. ¿Qué es el Karma?
  5. ¿Qué es el Dharma? 
  6. Las tres leyes de la reencarnación
  7. El Brahmanismo de la India
  8. La reencarnación en el hinduismo 
  9. La reencarnación en el budismo
  10. La idea del renacimiento en el budismo
  11. El viaje de la mente por el Bardo budista
  12. Qué la actividad de la mente de un niño, proviene de
  13. La muerte según el budismo 
  14. ¿Cuántas veces se reencarna? 
  15. La reencarnación por Osho
  16. La reencarnación Hare Krishna 
  17. La reencarnación en el Orfismo griego 
  18. La reencarnación de Pitágoras 
  19. El alma post mortem de Platón 
  20. La reencarnación en la Kabbalá
  21. El significado del alma judía 
  22. La inmortalidad del alma en el judaísmo 
  23.  La inmortalidad del alma por Tales de Mileto
  24. La inmortalidad del alma del zoroastrismo 
  25. La inmortalidad del alma egipcia 
  26. La inmortalidad del alma babilónica
  27. La inmortalidad del alma espiritista
  28. El alma del purgatorio católico 
  29. Así responde los reencarnacionistas 
  30. El sufrimiento necesario del alma budista 
  31. El significado del alma bíblica 
  32. El cuerpo en la muerte 
  33. La expiación de la muerte bíblica 
  34. El Tikún corrector del alma en vida 
  35. Las 7 acciones positivas del alma
  36. La redención bíblica del alma 
  37. El espíritu en el Olam Habá 
  38. La esfera adimensional espiritual eterna
  39. El silencio de la biblia sobre la reencarnación 
  40. 40. Juan el Bautista no fue la reencarnación de Elías
 
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NO SOY SUJETO DE UNA REENCARNACIÓN POST MORTEM

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  • El hombre nativo sumerio, acadio, asmoneo, asirio, egipcio y babilonico: Iniciaron con una fe muy vaga en la existencia ultraterrena. Creían en la reencarnación. Enterraban a sus reyes con lujosos artículos que creían llevarlos al otro mundo en un viaje por los ríos Éufrates y Tigris o por el subterráneo del inframundo. Creían que al fallecer el cuerpo del hombre quedaba solo como una vasija de arcilla y debía fundirse con el barro o el mismo polvo de la tierra, pero que el muerto continuaba su existencia en forma de alma vinculado al cuerpo físico y poseías sus necesidades físicas como beber y comer, pero no era el final del muerto.

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